Tradicionalmente el Niño de Mula ha sido un lugar de parada para el viajero que recorría la ruta desde Murcia a Caravaca ya que se encuentra a la mitad del trayecto Actualmente es un lugar de peregrinación, se realizan dos peregrinaciones al santuario una el día ocho de septiembre, en el que se realiza la Bajada, en la que multitud de personas acompañan al niño en su traslado hasta el Monasterio de las Claras. La segunda gran peregrinación es la popular romería que se realiza el veinte y dos de septiembre por la mañana en la que miles de personas acompañan la figura del Niño de Mula hasta su ermita y disfrutan de la comida en el campo.